Ubicado sobre la ruta 9, entre Rayo Cortado y Villa María de Río Seco, el establecimiento Las Chilcas sorprende por su modelo de producción agropecuaria en una de las zonas más postergadas de la provincia.
Una de las unidades de negocio de la empresa es una granja porcina de 500 madres de la que salen 1.200 lechones por mes, con destino al abastecimiento de carne para el mercado interno.
Pero, en febrero, la empresa cumplió un viejo anhelo: partió rumbo al frigorífico el primer camión cargado con 160 animales que se transformarán en medias reses y se embarcarán hacia el exterior.
La operación se formalizó a través de Argenpork, un consorcio de exportadores porcinos integrado únicamente por productores y que lidera el ranking del comercio exterior de cerdos en Argentina. Los principales compradores de esta carne son Rusia y Hong Kong.
Diversificar
Las Chilcas forma parte de Argenpork desde julio de 2017, pero recién este año pudo avanzar en su primera exportación. A partir de ahora, todos los meses destinará al menos el siete por ciento de su producción (unos 80 capones mensuales), que es el mínimo que exige el consorcio para integrarlo. Los 160 animales que formaron parte del primer envío se deben a que se juntaron las existencias previstas para enero y febrero.
Mario Aguilar Benítez, socio director de Las Chilcas, dijo: “Es un proyecto que veníamos gestando hace mucho, con la idea de diversificar el negocio y comenzar a tener el mercado de exportación como una posibilidad”.
En este sentido, reconoció que el volumen es pequeño y que no se trata de una alternativa que otorgue más rentabilidad que la venta al mercado interno. Actualmente, un cerdo en pie se paga en el mercado interno 45 pesos el kilo más IVA, contra un precio de integración kilo vivo en torno a los 40 pesos en el mercado internacional.
“Este no es un negocio ni de volumen ni de más rentabilidad por ahora, pero sí es estratégico; una válvula de salida para, si en el futuro las condiciones para exportar mejoran, poder jugar en esa liga”, subrayó Aguilar Benítez.
Al respecto, el empresario reiteró que el siete por ciento de la producción que deben entregar mensualmente al consorcio es un mínimo. “Pero, si de repente el mercado de exportación paga un mejor precio y se puede aprovechar, esa cuota se puede incrementar sin problemas”, afirmó.
Para Aguilar Benítez, “en el mercado de exportación hay que estar y tener los canales abiertos para que, cuando convenga más vender afuera que adentro, podamos hacerlo y se convierta en un muy buen negocio”. 5.794 son las toneladas de carne de cerdo que exportó Argenpork desde que comenzó a operar en 2017. En ese período, faenó 68.124 cabezas.
Foto: Mario Aguilar
Texto: Favio Ré/La Voz del Interior
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