“En sanidad, lo importante es reconocer el contexto donde se produce (presencia de materia fecal, superficies porosas, ratas, moscas, presencia de pies de escamación flotando en el aire, polvo, óxido (elemento poroso, que junta porquerías, donde las estructuras hacen masa en el suelo (usar aluminio y poner jabalinas), las aguas no están cloradas y por lo tanto hay una alta presencia de coliformes, aire viciado (la densidad CO2, metano, ácido sulfhídrico (más pesado que el aire), humedad, residuos, restos de comida” comenzó Garófalo.
Son todos agentes eteológicos, a esto hay que dividirlo (sistema inespecífico de defensa), acciones medicamentosas y manejo
Sistemas de inmunidad
-Específica: necesito conocer los agentes etiológicos (en muchos casos hay que tener en cuenta el historial de un galpón donde se produce).
Hay que construir un protocolo sanitario.
Si coloco un antígeno específico, hay que tener en cuenta que el sistema inmune es lento, no es instantáneo. Eso sí, la inmunidad tiene memoria.
Vacuna a partir del calostro (hay que pensar el calostro)
Inespecífica:
-No necesito conocer los agentes etiológicos.
-Innata o nativa (ver foto)
Respiratorio, piel: El aire del galpón, las mucosas en el sistema inespecífico de defensa. Estornudo, tos, hocico rojo, discontinuidad en la piel, orejas azules
El estómago, la lisis, las mucosas, los vómitos (la presencia de toxinas). “El cerdo nunca vomita, salvo en abril, por el maíz viejo)
El estómago se defiende por el pH ácido pero hay patogenia que sobrevive a esa acidez. Gases, replicación bacteriana, las diarreas (eliminación de un agente que está generando problemas)
“El sistema inespecífico está en guardia todo el tiempo, toda la vida. Por su rol, los natural killer, muchas veces ataca a tropa propia”.