El sistema de cama profunda consiste en la producción de cerdos en instalaciones donde el piso de concreto se sustituye por una cama de rollo de paja de trigo, rastrojo de maíz, cascara de maní, cáscara de arroz, viruta de madera, entre otros (Cruz et al., 2009). Este sistema permite reducir la cantidad de líquidos residuales emitidos al ambiente, provenientes del lavado de los corrales de las instalaciones en la crianza convencional.
Los materiales utilizados como cama sufren un proceso de descomposición in situ debido a la permanente incorporación de las excretas de los cerdos (Campiño & Ocampo, 2007), generando una fuente de materia orgánica que puede ser usada posteriormente (Uicab-Brito, 2004). Sin embargo, este material contiene microorganismos activos y requiere un proceso de compostaje fuera de las instalaciones para acelerar el proceso y lograr su estabilización.
El compostaje es un proceso biológico aeróbico que utiliza microorganismos para trasformar material orgánico biodegradable en humus. Este proceso destruye patógenos, convierte el N en formas orgánicas más estables, reduce el volumen de residuos (Stentiford, 1987; Wei, 2000) y satisface total o parcialmente las necesidades de fertilización en la agricultura según la estación (Zhu, 2007). Los factores que se deben tener en cuenta en su elaboración son la temperatura, aireación, humedad y nutrientes. La relación C/N es uno de los factores más importantes, afectando el proceso de compostaje y la calidad del mismo. Se considera que una relación de 25-30 es la óptima para compostar (Fong et al., 1999).
El objetivo de esta experiencia fue evaluar el proceso de compostaje, por el método de volteo con aireación, a través de variables químicas y biológicas, de un residuo proveniente del sistema de cama profunda porcina.
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